Seguro que conoces el popular refrán “Más vale prevenir que curar” y lo has dicho más en más de una ocasión. Pues en vez de decirlo… ¿Os parece si lo aplicamos? Es que el refranero español es muy sabio y hay que hacerle caso… Así que hoy vamos a contaros la importancia de la prevención en odontología y por qué es bueno hacerse revisiones periódicas, aunque, a priori, todo esté bien.

¿Te gustaría prevenir antes que curar?

Factores a seguir para una buena prevención en odontología

 

La importancia de la prevención en odontología no sólo radica en tener una buena salud bucodental, sino que también ganaréis en salud mental y en confort. ¿Y eso?, os plantearéis.

Pues veréis, si seguís los consejos que os daremos a continuación no sólo tendréis una boca más sana, sino que también os ahorraréis los disgustos provenientes de haber desarrollado una enfermedad bucal grave y de la consecuente inversión económica que conlleva.

¡No hay excusa que valga! La prevención en la salud bucodental es muy sencilla, tan sólo tienes que seguir las siguientes pautas:

 

 

Higiene dental

Adquirir buenos hábitos es esencial para lograr una buena salud, así que acostumbraros a cepillaros bien los dientes durante unos 2-3 minutos por lo menos dos veces al día (si son tres mejor). ¡Ah! Importante. No os olvidéis de la seda dental, esa gran olvidada os ayudará como nadie a eliminar la placa en los lugares que el cepillo no alcanza.

Ya lo dicen, se tarda 20 días en adquirir e incorporar a nuestra rutina un nuevo habito, así que… ¡a tope con el cepillado!

 

Dieta adecuada

Os parecerá una obviedad, pero debemos cuidar lo que comemos, potenciando el consumo de frutas y verduras y alimentos ricos en proteínas, vitamina C y calcio. Bueno y por supuesto, lo que tenemos que evitar son los azúcares y los alimentos ultra procesados. ¡Lo ideal sería que fuéramos real fooders vaya!

 

No fumar

Esto también es obvio, ¿no? Y es que el tabaco contribuye a amarillear la dentadura, a que salgan manchas en los dientes y a cosas mucho más graves como las enfermedades de encías o el cáncer oral.

 

Controlar el consumo de cafés y tés

Los cafés y tés debido a sus componentes también ensucian mucho los dientes, provocando que a la larga adquieran un tono amarillento nada estético, además de sus correspondientes patologías como la sensibilidad dental. ¡Dormir un par de horas más es un buen sustitutivo para el consumo de estas bebidas!

 

Visitar periódicamente al dentista

Los que mejor te van a poder asesorar y ayudar en caso de problemas son tus dentistas, así que acude a ellos de forma regular, aunque creas que todo está en orden. Una vez cada seis meses es una buena pauta. Solo así te asegurarás completamente de mantener una buena higiene bucodental.

 

Esperamos que este artículo haya aclarado vuestras dudas sobre la importancia de la prevención en odontología y a partir de ahora os animéis a ello. Si seguís estos consejos, garantizamos 100% que os sentiréis mucho mejor con vosotros mismos. Y por supuesto, si tenéis más dudas o queréis visitarnos, no dudéis en llamarnos. ¡Os esperamos!